Un proyecto de ley presentado en la Legislatura bonaerense prohibir la venta, expendio o suministro a menores de edad de bebidas energizantes en la provincia de Buenos Aires, debido a las consecuencias que provocan en la salud este tipo de productos que tienen componentes estimulantes del sistema nervioso central.
Bebidas energizantes en la mira
En Argentina se toman unos 125 millones de latas de bebidas energizantes al año y su consumo excesivo puede provocar un aumento de la presión arterial, taquicardia, arritmia cardíaca, irritabilidad, angustia y depresión, entre otros. A base de agua y aditivos, la mayoría de ellas, sin importar la marca, tiene una alta concentración de cafeína como estimulante.
La composición de las bebidas energéticas es variada y, en muchos casos, poco transparente. Además de la cafeína, que puede oscilar entre 75 y 260 miligramos por lata de 355 a 473 mililitros, estos productos suelen contener grandes cantidades de azúcar -de 30 a 70 gramos por porción, lo que equivale a hasta 15 cucharaditas- y una mezcla de otros estimulantes como taurina, ginseng, guaraná y ginkgo.
De acuerdo con el proyecto, se entiende por bebidas energizantes “aquellas que se promocionan o comercializan con la finalidad de producir estímulo, energía o mayor rendimiento físico o mental, y que contienen cafeína, taurina, guaraná, ginseng, glucuronolactona o cualquier otra sustancia con efectos similares”.
El proyecto incorporara la prohibición de venta en todos los establecimientos comerciales de la provincia y establece multas, clausuras temporales o definitivas y el decomiso de los productos en infracción en caso de incumplimiento. Además, prevé la obligación de exhibir cartelería visible que indique que “se encuentra prohibida la venta de bebidas energizantes a menores de 18 años”
