En medio de una etapa económica que el gobernador bonaerense Axel Kicillof calificó como «de resultados mixtos», desde el Ministerio de Hacienda y Finanzas bonaerenses sacaron a relucir datos de consumo en los supermercados que, durante julio, generaron un nivel de ventas superior a los 78 millones de pesos.
Según explicitaron desde la cartera económica, las ventas en supermercados de la provincia de Buenos Aires totalizaron concretamente los 78.027 millones de pesos, lo que significó un crecimiento en términos reales de 6,1 por ciento respecto de 2021 y 13,3 por ciento respecto de 2019.
Además, los datos señalan que julio fue el décimo mes consecutivo en superar los registros equivalentes de la pre-pandemia y si bien las ventas crecieron en todo el territorio bonaerense, se destacó el «dinamismo» en la región del Gran Buenos Aires, donde creció 8,4 por ciento contra julio de 2021 y un 16,5 por ciento en relación al mismo mes de 2019.
En tanto, desde el Ministerio realizaron una evaluación sobre los grupos de artículos que más crecieron en ventas, entre los que destacan electrónicos y artículos para el hogar donde se registró el mayor crecimiento interanual, con un 33,9 por ciento; seguido por verdulería y frutería, en un 11,3 por ciento y bebidas con un 9,1 por ciento. Caso contrario fue el de los lácteos e indumentaria y textiles, que registraron caídas respecto de julio de 2021.
«Las ventas en supermercados son un monitor del consumo, principal componente de la demanda. A su vez, la producción bonaerense creció 6,7 por ciento en el segundo trimestre. El alza del consumo y la producción son datos sumamente alentadores para lograr un crecimiento sostenible en la provincia», resaltó el ministro Pablo López.
Pese a los datos, en la Provincia miran con preocupación algunos parámetros. Así lo señaló el propio gobernador Kicillof hace algunos días, luego de que se conocieran los índices de pobreza e indigencia de agosto.
«Observo que estamos en una etapa donde hay resultados mixtos, la economía crece y el desempleo cae pero se deteriora la distribución y los ingresos van perdiendo. Si los precios suben mas que los salarios, los frutos del crecimiento quedan en los sectores concentrados», sentenció el gobernador en declaraciones a la prensa.
Fue en ese sentido que postuló que tanto el Estado como las empresas, deben sentarse a discutir el problema de la falta de distribución, al tiempo que señaló que «hay determinados precios que subieron sin justificación y a la vez los ingresos de los sectores trabajadores no reaccionan».
Por eso, al igual que la vicepresidenta Cristina Kirchner, sugirió «poner un instrumento, una forma de medir estas rentabilidades y ponerle límites a los aumentos de sectores que ganaron mucho», en especial los que lo hicieron «en perjuicio de los asalariados». Sin aclarar cuál o cuáles serían esas herramientas, sostuvo que «va a haber que sentar a los sectores» a debatirlo.
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