La hija de Mirtha tuvo un fuerte cruce en vivo y generó un escándalo
Hay primeras figuras con una fuertísima personalidad que no se callan la boca ante nada ni nadie pero, indudablemente, nadie supera a Marcela Tinayre cuando se enoja. La conductora de Las Rubias, programa que se emite por KZO, no tiene pelos en la lengua a la hora de mostrar su enojo y, cada vez que pierde la paciencia, como su famosa madre, dice lo primero que le pasa por la cabeza con mucha crudeza.
“Estoy mirando la parte de atrás de Marcela (Gotlib), porque a mí me escribieron diciendo si podía tener todo un poco más prolijo detrás de mí”, comenzó diciendo la diva, haciendo referencia a su panelista. “¡Pero qué metidos que son!”, le dijo su amiga, pero la mujer no la dejó terminar y apuntó contra la producción: » Qué carajo te importa» ¡Si es mi casa! ¡Hago lo que quiero! Además, me gusta esto. Es todo mucha vida acá atrás”. Recordemos que no es la primera vez que la mamá de Juanita pierde la paciencia.
Días atrás se le cayó un aro mientras transmitía desde su casa y eso también generó otro cortocircuito con sus productores: “Aro, que es divino que es del año pasado ¡Pero voy a hacer el programa con un solo aro! ¡Y me dejan de joder!”. Por supuesto, cuando quiere, Marcela es un encanto y lo demostró en una nota que concedió al programa Jubilados TV por América 24 donde habló de como vive el Coronavirus teniendo en cuenta que su madre es una mujer mayor y en riesgo.
“Yo me ocupé mucho de mi mamá y me ocupo mucho. Voy caminando hasta su casa, todo manteniendo una distancia. Nunca más le di un beso a mi mamá, ni ante el dolor de la pérdida de su hermana, nunca más le di un beso. No pude abrazarla. Los adultos, muy, muy, mayores, como mi mamá, viven esta pandemia con mucho miedo y eso les quita mucha energía. Pero también les han inculcado mucho el miedo, cuando ellos seguramente son los mejores alumnos”, remarcó.
Y agregó: “Yo tengo una madre muy activa, es increíble la garra que le pone, camina por la casa, va viene, pero están todos con mucho miedo. Tengo una madre muy independiente, laburadora, exitosa, memoriosa, inquieta, entonces jamás podría asumir con ella ese cambio de roles de ser madrea de mi madre”.
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