Aislamiento obligatorio: el Presidente recibe el apoyo de la gente pero le reclaman una medida puntual, ¿de qué se trata?

Los datos se desprenden de un estudio realizado a nivel nacional. 

Alberto Fernández anunciará hoy la continuidad de la cuarentena por el coronavirus, con flexibilizaciones focalizadas por provincia y muy acotadas en la Ciudad y el Gran Buenos Aires. El Presidente, acaso el más reacio a una apertura más osada, cuenta con una carta marcada a su favor: la mayoría de la gente, desde el arranque de la crisis sanitaria, apoya la severidad de las restricciones. Pero a medida que pasan las semanas, reclama solidaridad en el esfuerzo. Y pide, con contundencia, una medida que Fernández resiste: «Recorte y baja de los sueldos de políticos y funcionarios».

El dato surge de una encuesta nacional a la que Clarín accedió en exclusiva. Es de Opinaia, una consultora pionera en las mediciones online y que trabaja para el mundo de la política y los negocios. Su nuevo estudio incluyó un relevamiento de 1.800 casos, entre el 13 y el 20 de abril, con un margen de error de +/- 2,3%.

«La adhesión al aislamiento social, preventivo y obligatorio continúa siendo prácticamente total, con valores de aceptación superiores al 90%. Esto explica que el acatamiento efectivo de la cuarentena , salvo excepciones, sea elevado», es la primera conclusión del sondeo. Este dato se ve en el cuadro de la página 12 del informe, donde consultan a la gente sobre el «nivel de acuerdo de medidas y proyectos».

Opinaia planteó específicamente: «A continuación, aparece una serie de medidas que ya fueron tomadas o que quizá se implementen a futuro, a raíz del coronavirus. ¿Cuán de acuerdo está usted con estas medidas?». Se ofrecen cinco opciones de respuesta: dos positivas («muy» o «bastante de acuerdo»), dos negativas («poco» o «nada de acuerdo») y la neutra «no sabe».

El «aislamiento preventivo y obligatorio», y «usar tapabocas o barbijo para circular en la calle» suman un 94% de acuerdo, repartido de la misma manera: 74% «muy» y 20% «bastante de acuerdo». Luego, en el global, viene «créditos a pequeñas y medianas empresas para que puedan pagar sueldos», con 92% total (68% «muy» y 24% «bastante de acuerdo»).

Recién después aparece «recorte y baja de los sueldos de políticos y funcionarios», con 90%. Pero con una particularidad: es el reclamo que tiene más intensidad, con un 80% «muy de acuerdo» y 10% «bastante», explican desde Clarín.

Completan en la valoración de las medidas: el «ingreso familiar de emergencia a desocupados, planes sociales y monotributistas» con 77% de aval (54% «muy de acuerdo» y 23% «bastante») y el «impuesto a las grandes fortunas» (65%, con 47% «muy de acuerdo» y 18% «bastante»).

Respecto al recorte de sueldos de políticos y funcionarios, fue un reclamo que motorizó básicamente la oposición, y que se reflejó en cacerolazos dispersos durante algunas noches; sobre todo en barrios porteños. Desde el Frente de Todos acusaron al sector más duro del macrismo de fogonear la movida. Aunque hubo matices: Miguel Pichetto, candidato a vice de Mauricio Macri, salió a decir que se oponía; mientras que Sergio Massa, titular de la Cámara de Diputados, se diferenció dentro del oficialismo y propuso una rebaja salarial del orden del 40%.

En medio de la discusión, el Presidente fijó postura. «Yo reivindico la política, el servicio público que la política presta. Yo no voy a ser un hipócrita. Esa no es la solución que la Argentina necesita, la verdad no estoy de acuerdo con eso. Nunca me sumé a esa lógica», aseguró a principios de abril y destacó el trabajo de su equipo: «Yo soy parte de un Gobierno de funcionarios que los llamás a las 7 de la mañana y están; y los llamas a la 1 de la mañana y están, y siempre tienen respuestas para todo». Por último, Fernández señaló que, en ese debate, le parecía mejor el impuesto a las grandes riquezas que por entonces empezaban a impulsar Cristina y Máximo Kirchner.

Be the first to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo no será publicada.