El ajuste y la quita de subsidios impulsados por la administración de Javier Milei vieron en marzo una nueva suba en los valores de las facturas de luz y algunas llegaron con aumentos del 300 por ciento.
La medida afectó a los usuarios no residenciales como la industria, hospitales, hoteles, alumbrado público y consorcios de edificios con su respectivo impacto de más del 20 por ciento en el valor de las expensas.
“En un edificio de oficinas de 13 pisos sobre avenida Córdoba, alrededor de Tribunales, que pagaba $ 500.000 en febrero, la factura se fue a $ 1.700.000 este mes. Hay edificios donde la electricidad de la portería se fue de $ 6.000 a $ 25.000“, comentó Miguel Summa, presidente de la Cámara Argentina de la Propiedad Horizontal y Actividades Inmobiliarias (CAPHAI).
Por su parte, Victoria Loisi, abogada y miembro de la Liga del Consorcista de Propiedad Horizontal, añadió: “Este mes ya se empezó a notar el efecto y con las próximas expensas, aún más. La suba en algunos casos pudo haber sido de 350% y el impacto para los propietarios e inquilinos es proporcional a la incidencia que tiene la energía en los costos del edificio, que puede ser del 10% al 20%. En los que tienen varios ascensores o amenities, el impacto puede ser mayor”.
En algunas provincias se empezaron a dar créditos para pagar las facturas. Tal es el caso de Córdoba, donde el gobernador Martín Llaryora, definió el otorgamiento de hasta 3 cuotas para poder abonarlas, al igual que en Tierra del Fuego y Misiones.
En un hotel mendocino propiedad de un importante empresario, la factura de luz pasó de $15 millones a $65 millones, según revelaron fuentes a Clarín.
Otro caso es el del municipio de Esteban Echeverría, por ejemplo, el intendente Fernando Gray, informó que la localidad tuvo que afrontar un aumento del 277 por ciento y pagó $271,1 millones en marzo cuando en febrero la suma era de $71,8 millones.