Los billetes de 1.000 pesos perdieron seis veces su valor como consecuencia de la alta inflación

Según un estudio privado, que relevó la cantidad de productos que se pueden comprar con los nuevos billetes, a partir del seguimiento desde 2008 a la actualidad.

La inflación sin freno que vive la argentina ha dejado a su moneda como una de las de menor poder de compra de la región. A pesar de los cambios estéticos que hizo el Gobierno de Alberto Fernández, en los últimos días, la pérdida del valor real de los billetes de 500 y mil pesos es abrupta.

Así lo reveló un informe privado que comparó que cantidad de productos, considerados de la canasta diaria podían comprarse con 500 y 1000 pesos desde 2008 hasta hoy.

“La pérdida de poder adquisitivo del peso argentino es preocupante. Una canasta de 17 productos básicos, al comenzar el mandato de Cristina Fernández de Kirchner, se resolvía con 134 pesos, mientras que al finalizar su segunda presidencia se requería, unos 571 pesos”, explicó el director de Focus Market, Damián Di Pace.

En el relevamiento, realizado por la consultora, se sostiene que, “al finalizar el mandato de Mauricio Macri para la misma compra se requería 2.196 pesos y en el caso de Alberto Fernández el aumento es muy importante y se requieren unos 6.444 pesos para comprar los mismos productos”.

Uno de los productos que más se vio afectado por la escalada de valores, es la yerba mate, que desde 2008 a la actualidad, subió un 11.402 por ciento. Mientras que con 500 pesos en 2008 se podían comprar 162 paquetes de ese popular producto, en 2022 compramos solo 1 paquete.

Por otro lado, en 2008 con mil pesos se podía acceder a 323 paquetes de yerba, y hoy se compran solo 3 paquetes.

“Hoy para recuperar el poder adquisitivo de un billete de 1.000 pesos, en su nacimiento debería valer 6.000, pero estamos ocupados de su diseño y no de cómo recuperar el valor de nuestra moneda cada vez más deteriorado”, afirmó el economista a cargo del estudio.

En tanto que los “ajustes de precios en la industria de consumo masivo pasaron de mensuales a quincenales en los últimos dos meses en varias categorías básicas”, agregó Di Pace.

“En este caso se puede ver que el aumento acumulado del Aceite de Girasol de un 1,5Lt desde 2008 a la actualidad, es de 8.166%. Y mientras que con $500 en 2008 se compraban 64 botellas de aceite, en 2022 no se llega a comprar una botella”, destaca el informe.

Por otro lado, en 2008 con $1.000 se accedía a 129 botellas de aceite, y hoy compramos 1,6 botellas.

En el caso del Pan de molde por 390 Grs desde 2008 a la actualidad, es de 6.567%. Y mientras que con $500 en 2008 se podían comprar 115 paquetes de pan de molde, en 2022 compramos 1,7 paquetes. Por otro lado, en 2008 con $1.000 comprábamos 230  paquetes de pan de molde, y hoy compramos 3 paquetes.

“Si bien desde el presidente de la Nación, Alberto Fernández, hay un discurso manifiesto de su preocupación por la inflación, la realidad de las cuentas fiscales muestran que el piso de la inflación para 2022 es superior al esperado”, manifestó el titular de Focus Market.

Además, la alta inflación permite licuar parte del gasto público en un contexto de intento de disminución del déficit fiscal. Por su parte, la corrección de los precios relativos de la economía como el tipo de cambio oficial, tarifas de servicios públicos, sumado a la emisión monetaria que actúa en rezago, deja un colchón inflacionario para la aceleración de precios futura aún muy elevada.

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