Con ayuda de docentes de la Licenciatura en Diseño Industrial y la Secretaría de Ciencia y Técnica de la Universidad, fabricaron máscaras y las donaron a los hospitales Evita, Piñero, Arturo Melo, el Policlínico Santamarina, la UPA N°4 de La Matanza y centros de salud del SUTEBA.
Alumnos de la Universidad Nacional de Lanús (UNLa) nucleados en el Centro de Estudiantes de Humanidades y Artes (CEDHA), con la colaboración de docentes de la carrera de Diseño Industrial y la Secretaría de Ciencia y Técnica de la Universidad, ya fabricaron y donaron 260 máscaras protectoras faciales reutilizables 3D a personal de salud, en el marco de la pandemia de coronavirus.
Las entregas comenzaron hace tres semanas e incluyeron a los hospitales Evita (Lanús Oeste), Dr. Arturo Melo (Remedios de Escalada), Piñero (Capital Federal), la Unidad de Pronta Atención (UPA) N° 4 de La Matanza y el Policlínico Santamarina (Esteban Echeverría). También se donó a los centros de salud del Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (SUTEBA) y a distintas organizaciones comunitarias.
¿Cómo surgió la iniciativa?
“Cuando comenzó la cuarentena y las autoridades sanitarias explicaron las características de la transmisión del virus, la necesidad de contar con estas máscaras comenzó a crecer. Entonces estudiantes de la Licenciatura en Diseño Industrial expresaron su necesidad y deseo de ayudar, ya que parte de las máscaras podían realizarse con una impresora 3D, una herramienta que varios poseían, pero faltaba quizás organizarse con la cuestión de insumos y distribución, entre otras cuestiones”, explica Sol Albi, presidenta del Centro de Estudiantes de Humanidades y Artes.
“A partir de ahí, todos y todas los que integramos el CEDHA nos pusimos a disposición para darles una mano y comenzó el proyecto. Así fue que nos contactamos con algunos docentes de la carrera, convocamos a más estudiantes y también sumó su apoyo la Secretaría de Ciencia y Técnica de la Universidad. La realidad es que hoy es una iniciativa que sigue creciendo y que nos enorgullece formar parte”, agrega.
Las características
Las máscaras son impresas en 3D, con una lámina de acetato que impide que las microgotas de los
pacientes tengan contacto con el rostro del personal de la salud.
“Después de investigar y escuchar distintas opiniones de médicos y profesionales, nos volcamos por hacer este modelo que cubre desde un poco más arriba de la frente hasta el mentón, y es muy seguro para médicos y enfermeros”, explica Manuel Díaz, el estudiante de Diseño Industrial que coordina el proyecto y que también es integrante del CEDHA.
La confección se realiza con impresoras 3D que los estudiantes de Diseño Industrial cuentan en sus casas (actualmente 15 alumnos son los que participan en esta tarea). Una vez impresas las viseras, se ensamblan con las láminas de acetato.
La mayoría de los materiales fueron aportados por la Secretaría de Ciencia y Técnica de la UNLa. “Algunas organizaciones, los demás integrantes del CEDHA y compañeros del espacio Estudiantil Granate también dieron su aporte para la compra de insumos. En el caso de las entregadas en el SUTEBA, el material fue comprado por ellos y lo que nosotros realizamos fue poner el trabajo y las máquinas”, agrega Díaz.
La logística
Integrantes del Espacio Estudiantil Granate y del CEDHA que cuentan con el permiso obligatorio
correspondiente para la circulación se encargan de la distribución, mediante sus vehículos particulares.
Cómo sigue
Los estudiantes no tienen en mente un número determinado de máscaras que fabricarán, ya que la cifra variará de acuerdo a la demanda de centros de salud de la zona. “De lo que sí estamos seguros, es que el objetivo es que nuestros trabajadores de la salud tengan los elementos necesarios para su protección. Y si nosotros podemos contribuir haciendo máscaras, lo vamos a seguir haciendo”, comenta Díaz.
Y concluye: “Este proyecto nace de los valores que nos inculca la UNLa, de la mano de nuestra rectora Ana Jaramillo, que nos forma con la mirada de una Universidad comprometida con nuestro territorio. Sin duda, como estudiantes, tenemos que dar respuesta a esta pandemia y no dudamos en ponernos a trabajar. Por suerte encontramos actores que nos escucharon y nos dieron una mano”.
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