Una curiosidad nacida en su adolescencia pudo descubrir una fuerte vocación. Martín Slavec estudia la doctrina peronista desde muy joven, y analiza sus pensamientos más sólidos y también sus contradicciones.
Martin Slavec es el ejemplo de cómo un interés, una curiosidad de adolescente se puede transformar en una vocación.
Su historia comienza en la Escuela Secundaria de la mano de dos Profesores que lo guiaron. Ellos dictaban Filosofía, y el otro – Historia -. Este último le enseñó a hacer una línea cronológica para poder comprender todos los hechos de nuestra historia.
Con esa metodología se tomaban los años 50, analizando el acontecer de la realidad en Argentina, para trazar un paralelo con lo que estaba sucediendo en Europa. Fue entonces que recién a sus 40 años de edad, surge entre sus inquietudes la necesidad de reconectarse con la Historia, específicamente con la del Peronismo contada por Perón. De esta manera decide investigar la doctrina Peronista que comienza en el año 1944 y se extiende más allá del 51, desmenuzando el cómo y por qué el fenómeno Peronista caló tan profundo en los corazones de sus seguidores.
Ese impulso lo llevó a comenzar una búsqueda de literatura compuesta por publicaciones oficiales y todo tipo de libros del Peronismo. La recopilación incluye los discursos de Perón de los años ´40 y ´50, profundizando en el estudio detallado de esos mensajes que se dirigían al pueblo en aquellos actos multitudinarios.
Entre los resultados de ese análisis, Martin Slavec encuentra un discurso sencillo para las masas, ¨ Perón era un hombre de la política, un militar, muy culto e instruido. En sus actos utilizaba palabras simples, pero no escribía de la misma manera; sus textos hablaban de la tercera posición, de Marxismo y de Economía¨.
Entre sus muchas publicaciones y libros se encuentra un libro distintivo del Peronismo, -La razón de mi vida- de Eva Perón. ¨Allí se hablaba de un Nacionalismo de inclusión, que fue escrito para engrandecer a la figura del máximo líder¨.
Dado que Juan D.Perón no contaba con tiempo para escribir, debido a sus funciones como Presidente, algunos de esos libros fueron redactados por Alejandro Apold quien fuera miembro de la Confederación General del Trabajo (CGT) y hombre de extrema confianza del General.
La composición de la biblioteca del entrevistado se fue enriqueciendo con publicaciones que se han ido adquiriendo a lo largo de los últimos 15 años. Cuenta con este material como centro de consulta. Su pretensión es poder conformar un espacio de estudio del fenómeno Peronista en todas sus dimensiones
– ¿Por qué pusiste tu atención o focalizaste especialmente en las palabras que más utilizaba para sus discursos?
Porque el peronismo es un fenómeno que hay que analizarlo desde esa capacidad especial para llegar de manera contundente a las masas. Debe ser estudiado en su discurso y su propaganda, mucha de ella plasmada en afiches, donde queda expresado un fuerte contenido emocional y simbólico. No había tampoco demasiados medios para que la palabra fuese escuchada. Estaba la radio y los diarios. Los afiches estaban más dirigidos a las clases postergadas, donde muchos no sabían leer y estas imágenes permitían transformar el mensaje en un idioma sencillo que todos comprendían.
– ¿Cuando tomás los apuntes, dónde pones la atención?
Yo leo, y cuando veo algo que me hace ruido o me representan estas ideas del Perón nazi, me pongo a estudiar a qué se refiere. Nosotros teníamos una Escuela del Ejército donde se enseñaba la Historia con un nivel académico superior a la Universidad. El Ejército Argentino tenía cierto gusto por el Ejército Alemán, lo ves en sus trajes y demás y eso no quiere decir que eran fascistas. Entonces cuando investigo apunto a saber por qué duró tanto el Peronismo y cuál fue el motivo para que lo derrocaran. Perón vuelve en el ´73 y lo vuelven a derrocar. Argentina tuvo seis golpes: el del 1930, el del ´43 pero ese fue un golpe de transición, dado que al poco tiempo se llamó a elecciones, hasta que Perón llega a la Presidencia en el año 1946. Luego otro golpe en el año 1955 y otro más en el ´62. Y los dos últimos uno del ´67, y el otro de 1976.
– ¿Todo este conocimiento te permite definir qué es el peronismo de hoy?
Por supuesto, por eso afirmo que este gobierno actual no es Peronista. El Peronismo primero ¨hace¨, se es Peronista. Luego tenés que demostrar una tendencia, el movimiento es Peronista y el Partido es Justicialista. Veo al Presidente Alberto Fernández en el Justicialismo, pero no entiendo qué está haciendo, es como que se desvirtuó todo.
En prima fase sos Peronista después sos lo que quieras. El Peronismo ejecuta, decide, toma una posición y va para adelante. Hoy es un Gobierno de coalición, un Gobierno de coalición no tiene una doctrina.
– ¿Y qué sentido le encontrás a toda tu labor en el tema?
El sentido de toda mi investigación es para que en un futuro se puedan formar cuadros, pero que tengan un conocimiento basado en la verdad, sin repetir cosas que Perón no dijo y reconociendo como ciertas las verdades expresiones vertidas por el general. Después vendrá el debate y el análisis político, pero siempre sustentado en el material que transmita su verdadero pensamiento.
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